La escasez de donantes en Chile cobra una nueva víctima mientras la familia clama por mayor conciencia
El sábado, en una jornada marcada por el dolor y la impotencia, José Miguel Arancibia, un joven quillotano de tan solo 23 años, perdió la vida mientras aguardaba con esperanza un trasplante de hígado que nunca llegó. La causa de su fallecimiento fue una falla multisistémica, resultado de una hepatitis fulminante que deterioró su salud en cuestión de días.
Su historia, llena de sueños y talento, hoy se convierte en un llamado urgente a la conciencia sobre la crítica situación de la donación de órganos en Chile. José Miguel, estudiante de Producción Musical en la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, había dedicado su vida a la música, pero su batalla contra la enfermedad terminó antes de poder recibir el tratamiento que le habría dado una segunda oportunidad.
La urgencia de la donación de órganos
La trágica muerte de José Miguel pone de relieve la insuficiencia de donantes en el país. Chile enfrenta un grave déficit de donación de órganos, consecuencia de múltiples factores, entre ellos la desinformación, el miedo y la falta de infraestructura adecuada para realizar trasplantes.
“Cada día que pasa sin recibir un trasplante, es una sentencia para cientos de personas que luchan contra el tiempo. José Miguel es solo uno de los muchos que han perdido la vida esperando”, señala un representante de una fundación de apoyo a pacientes en lista de espera.
La comunidad médica y las familias afectadas insisten en la necesidad de reforzar campañas educativas y mejorar el sistema de coordinación de trasplantes para evitar que casos como el de José Miguel sigan repitiéndose.
Funeral y despedida
El cuerpo del joven está siendo velado en la Funeraria Ellen Campos, ubicada en Freire 459, Quillota. Su funeral se realizará este lunes 26 de mayo a las 16:30 horas en el Cementerio Parque Boco, donde familiares, amigos y quienes conocieron su historia le darán el último adiós.
La familia de José Miguel ha expresado su profundo agradecimiento por las muestras de cariño y solidaridad recibidas en este difícil momento, mientras recalcan la necesidad de generar conciencia sobre la importancia de ser donantes de órganos.